Se nos ha ido David Bowie.
De verdad que no se lo vamos a perdonar. Nos da igual la ley de vida:
sin él, el mundo brilla menos y tiene menos luz. No está bien eso de
largarse con Joe Cocker, Lemmy Kilmister o BB King y dejarnos aquí a Justin Bieber, Kanye West y a toda la chusma incapaz de reemplazar a los genios de antaño.
De verdad, no te lo perdonamos, Bowie. Nos haces una putada muy gorda y
no nos conformamos con tu despedida en 'Blackstar'. Pero parece que así
es la vida y tenemos que resignarnos a perderte, a saber que ya no
volverás a deambular por las calles de Nueva York y a tener que escuchar
la obra que dejas detrás, sabiendo que no habrá nada nuevo en el
horizonte. En cualquier caso, algunos te vamos a echar mucho en falta. Adiós, Bowie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario